A volarse la barda.

El volarse la barda es una expresión utilizada en los juegos de béisbol,   cuando la pelota es lanzada
fuera de cierta área y eso permite anotar carreras.  Cotidianamente significa hacer algo fuera de lo común, sobrepasar expectativas.
 
La Biblia nos relata en el Evangelio de Lucas 7:37 y 38 la historia de una mujer que no solamente demostró  agradecimiento a Jesús, sino  que demostró devoción. Devoción es entregarse totalmente y sin reservas hacia una causa, idea etc.  Es sentir una atracción irresistible hacia algo o alguien.  Esta mujer mostró una entrega total, una atracción irresistible hacia la persona de Jesús.

Entonces una mujer de la ciudad, que era pecadora, al saber que Jesús estaba a la mesa en casa del fariseo, trajo un frasco de alabastro con perfume;

 y estando detrás de él a sus pies, llorando, comenzó a regar con lágrimas sus pies, y los enjugaba con sus cabellos; y besaba sus pies, y los ungía con el perfume.

Era costumbre de esa época ofrecer agua para lavarse los pies a un invitado, esta mujer no lavo los pies de Jesús con agua, los lavó con sus propias lágrimas. Era costumbre también recibir al invitado con un beso  en la mejilla, esta mujer no cesó de besar los pies de Jesús. Como si fuera poco, utilizó un perfume reservado para ocasiones especiales y lo derramó sobre el Maestro.

La Biblia nos relata como esta mujer fue objeto de severas críticas por parte de los mismos discípulos de Jesús,  ¡que exagerada fue, que impulsiva, que despilfarradora!,  etc  etc.  Ella lo único que hizo fue: volarse la barda y agradar con su entrega sin reservas al único que merece toda nuestra devoción.

.Estás dispuesto a volarte la barda por Jesús?

 

 

 

Olvidos

Cuantas veces hemos olvidado algo importante que debíamos hacer sin demora? pagar la factura de la luz, llamar a un proveedor, comprar una medicina o bien felicitar a mi mejor amigo por su cumpleaños.   Cuantas veces nos hemos sentido tristes porque hemos sido objeto del olvido de nuestra familia, amistades etc.
 Conforme transcurren los años, nos vamos haciendo mas olvidadizos. En estos días me enteré que una persona con una mente muy brillante está padeciendo una enfermedad y casi ya no reconoce a nadie.
Olvidos, olvidos y olvidos!!  Estos olvidos nos hacen pensar muchas veces que también Dios se olvidó de nosotros, por que no? si a nosotros también nos sucede con frecuencia, sin embargo aunque los años pasen Dios no se olvida de nosotros, el sigue atento, el  permanece inmutable, Dios no envejece.

El Salmo 136: 23 dice:

El se acordó de nosotros en nuestras debilidades.

Su fiel amor perdura para siempre.

 

Este hermoso salmo, muy recomendable de leer a menudo, nos describe todas las obras de Dios realizadas por y para su pueblo.  Cada una de esas frases concluye diciendo: Su fiel amor perdura para siempre. Esto es intencional, es para que nosotros nunca olvidemos que Dios no nos olvida.

 

 

No hay edad, enfermedad, o cualquier otra razón que borre de la mente de Dios nuestro nombre. Su continúo pensamiento es con nosotros siempre.  Aunque todos nos olviden, Dios nunca nos olvidará.

 

 

Su fiel amor perdura para siempre.