Firmeza es una
palabra que expresa estabilidad,
seguridad, consistencia. Se habla mucho
de la firmeza de carácter que una persona debe tener para alcanzar sus
objetivos, sus sueños etc. Difícilmente
alguien inestable, inseguro e inconsistente logrará cumplir sus metas en la vida.
Los tiempos difíciles requieren de firmeza. Es en esos tiempos donde nuestra fe es puesta a prueba. Sin embargo, nuestra fe debe sostenerse en la firmeza de las promesas
de Dios y no en nuestras propias fuerzas. Uno de los pasajes bíblicos que exalta la firmeza
de nuestro Dios es:
Números 23:19 Versión
Reyna Valera 1960
Dios no es hombre
para que mienta,
Ni hijo de hombre
para que se arrepienta.
El dijo y no hará?
Habló y no lo ejecutará
Debemos confiar plenamente en la
firmeza de Dios quien no se apoya en nadie, ni necesita, consejo de nadie. Dios
es el único que conoce el por qué? El
para qué? el cómo? y el cuándo? de los tiempos difíciles que llegan a nuestra
vida.
Dios no cambia, El permanece
firme y en eso debemos reposar. Lo que
ha designado para nuestra vida, lo hará.
Oraciòn: Señor, hoy descanso no en mis fuerzas sino en
tu firmeza. Sé que en este tiempo difícil
de mi vida, debo confiar en ti, que no mientes y no te arrepientes. Reposo en
la confianza que lo que tú has dicho lo harás y lo que has hablado lo
ejecutarás. Si, Tu no cambias, tu permaneces firme, Tu eres la Roca de los
Siglos.
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